Me llamo Celia Sánchez-Ramos, tengo desde hace pocos días 56 años y nací en la ciudad de Zaragoza que está situada en el noreste
de España.
Las personas que me conocen en el día a día de trabajo, eh, mis hijos por ejemplo también, pues yo creo que me describirían
como una persona activa, vital, eh… generalmente de buen humor, pero cuando me enfado, seria y rotunda. Y… afable con la gente,
eh, yo creo que en general una persona de trato fácil.
En mi vida es importante la…, la amistad por supuesto, eh, hacer agradable la vida de mi entorno, eh, sentirme bien conmigo
misma, ¡muy importante! Cada día, muy importante, poner objetivos a corto plazo y a medio plazo, satisfacerme cuando los cumplo,
ilusionarme con nuevas metas y ¡ah! la automotivación, el…, quizás sea una de mis normas de vida, la automotivación, que,
en mi opinión, está íntimamente ligada a la madurez.
Yo creo que me hacen felices [feliz] muchas cosas, yo soy fácil de contentar en ese sentido. No le pido a la vida grandes
hitos. Mm… me hace feliz el trabajo bien hecho, me hace feliz una buena respuesta, me hace feliz, mm… mm… sentirme útil, me
hace feliz eh… sí. Me hace feliz, mm… saber que me voy a caer y me voy a levantar. Es decir, esto que dan los años que tiene
que ver con la madurez, que tiene que ver con la falta de miedo.
La gente no se esperaría de mí, pues, a lo mejor que sea una buena ama de casa. Pues no se esperarían de mí, mi entorno, eso,
no lo soy. Entonces no se lo esperan porque no lo soy.