1 Trabajar juntos en equipo

Una auténtica ventaja del enfoque de RETOPEA es que, a lo largo del proceso de grabación, los participantes abordan activamente cuestiones relacionadas con la tolerancia religiosa y la paz en el pasado y el presente. Esto no solo se debe a la capacidad de facilitar una inmersión creativa y multisensorial en estas ideas que pueda tener el proceso de realización del vídeo. El hecho de que los jóvenes tengan que encontrar formas de trabajar juntos en equipo para hacer un vídeo ayuda a profundizar y mejorar la experiencia de aprendizaje. Por lo tanto, el proceso de creación de la película es tan importante como el producto terminado o incluso puede serlo más.

EN LA PRÁCTICA: Familiarizar al grupo con el proceso de grabación.

Se recomienda dar a los participantes la oportunidad de «calentar motores» y de que se familiaricen con estar detrás y delante de la cámara. Esto puede consistir simplemente en que se turnen para grabarse, decir su nombre o hablar brevemente sobre lo que desayunaron.

Por otro lado, si tienen un poco más de tiempo, puede pedirles que se graben unos a otros respondiendo a una o ambas de las siguientes preguntas:

  • ¿Qué significa para ti la tolerancia religiosa?
  • ¿Cómo te puede ayudar la historia a pensar en la diversidad religiosa y la tolerancia de hoy en día?

Responder a estas dos preguntas proporciona a los jóvenes la oportunidad de darse cuenta de lo que es tener que responder una pregunta compleja de manera concisa frente a una cámara.

No es necesario incluir estas grabaciones en el docutube (aunque podría hacerse, si algún grupo lo desea). El objetivo principal de esta actividad es ayudar a los participantes a familiarizarse con el proceso de grabación y con el material, a la vez que tienen la oportunidad de comprobar tanto el vídeo como el sonido. Esta actividad también puede ayudar a decidir en qué función querrían centrarse dentro de su grupo los diferentes miembros del equipo para la creación del docutube. Algunos jóvenes pueden decidir que se sienten más cómodos detrás de la cámara, mientras que otros pueden preferir hablar a la cámara como presentadores o actores.

Hay buenas razones para trabajar en grupos de tres o cuatro personas, ya que deben tenerse en cuenta las diferentes tareas y funciones necesarias para hacer el vídeo. Un grupo de tres personas puede, por ejemplo, tener a una persona a la que se graba mientras habla a la cámara (ya sea presentando, actuando o entrevistando), otra que graba y una tercera que dirige. Si tienen un equipo de sonido separado (que no es obligatorio, pero proporcionará una mejor calidad de sonido), manejar este equipo puede ser otra función importante que debe asumir un miembro del equipo de grabación. En la medida de lo posible, se debe animar a que los miembros de cada grupo se turnen para realizar estas diferentes tareas.

Imágenes 1, 2, 3: Jóvenes en Londres realizando su docutube. Imagen 4: tres estudiantes grabando su docutube en Varsovia
Figura 2 Jóvenes trabajando juntos durante el proceso de realización del vídeo.

EN LA PRÁCTICA: Decidir las funciones dentro del grupo.

Para evitar desacuerdos entre los diferentes miembros del grupo a la hora de turnarse, puede ser práctico que los participantes efectúen un sorteo o lo echen a cara o cruz. Un grupo que trabajó particularmente bien en equipo jugaba a «Piedra, Papel, Tijeras» para decidir a quién le tocaba realizar las diferentes tareas.

Introducción

2 Consideraciones éticas