3.2.6 Formación en inclusión y equidad

Los principios de inclusión y equidad deben caracterizar todos los niveles de la formación docente inicial, desde la contratación de docentes en formación hasta la contratación de formadores de docentes, así como el contenido y el enfoque de la formación. Los planes de estudios de la formación docente inicial deben incluir un enfoque explícito en la formación en inclusión y equidad, de modo que los principiantes aprendan a enseñar de manera inclusiva a todos los alumnos, sin importar su género, discapacidad, etnia e idioma o pertenencia a grupos minoritarios. Los docentes deben ser conscientes de los mecanismos de exclusión, prejuicio y discriminación y estar capacitados para adaptar sus métodos y materiales didácticos a las diferentes necesidades de aprendizaje de los distintos grupos de alumnos, en particular aquellos con necesidades de aprendizaje especiales. La formación debe contemplar una educación en ciudadanía y equidad para garantizar una participación eficaz. Si la formación tuviera un foco en la equidad, se garantizaría que hubiera un número suficiente de docentes formados para educar en la lengua materna (UNESCO, 2010d: 186-87; UNESCO, 2014a: 218, 239, 247).

La formación en inclusión y equidad en la formación docente inicial debe reflejar la política nacional para una educación inclusiva. Si esa política no existiera aún, los gobiernos deben considerar desarrollar una, garantizando a la vez su coherencia con la política docente.

3.2.5 Cualificación, inducción de nuevos docentes, tutoría y período de prueba