5.3.2 Marcos lógicos y planes de trabajo

Si se adapta de manera adecuada, un marco lógico que haya sido desarrollado como un diseño de proyecto y una metodología de gestión, y haya sido usado por numerosos organismos bilaterales y multilaterales para el desarrollo (como el Banco Mundial) en países de rentas altas, puede ser útil para que los responsables de la implementación hagan un seguimiento del proceso. Una matriz de marco lógico vincula los objetivos, las metas, los propósitos y los resultados esperados a través de actividades planeadas con indicadores «objetivamente verificables» o cuantificables. El objetivo es medir el progreso, al tiempo que se especifica un medio para verificar los indicadores (información) y los supuestos. Un ejemplo a nivel internacional es el marco lógico desarrollado por la UNESCO para la implementación de la Iniciativa de Formación Docente para el África Subsahariana (UNESCO, 2007, http://unesdoc.unesco.org/ images/ 0015/ 001539/ 153940e.pdf [Tip: hold Ctrl and click a link to open it in a new tab. (Hide tip)] ).

Un plan de trabajo para poner en práctica estrategias o programas constituye un enfoque alternativo. El plan de trabajo para apoyar el plan para el sector educativo en Ghana (Cuadro 2.1) contiene varios componentes agrupados por objetivos para los docentes o para la enseñanza: la mejora de la calidad de la enseñanza y del aprendizaje; la mejora de la gestión de la prestación de servicios educativos, así como la dotación y asignación de docentes. La matriz del plan de trabajo vincula estos objetivos con metas (resultados y productos) y proporciona un resumen de la estrategia, las actividades, los plazos y las unidades u organismos responsables (Gobierno de Ghana, 2012).

Desarrollar un marco lógico y un plan de trabajo como parte de la implementación de la política puede proporcionar claridad de propósito y dirección, y ayudar a desarrollar la colaboración entre unidades, departamentos y organismos. Sin embargo, se deben tener en cuenta los posibles límites de cada herramienta: una tendencia a la rigidez tal como está definida en la matriz y, por lo tanto, una falta de flexibilidad en adaptar la implementación a circunstancias y restricciones cambiantes (políticas, económico-financieras y, sobre todo, humanas), así como una dificultad para obtener aportes significativos de las partes interesadas a la matriz, ya sea en la etapa de concepción, en la implementación o en la supervisión/evaluación. Los marcos lógicos y los planes de trabajo siguen siendo herramientas para uso interno, útiles para los que participan en el diseño e implementación de la política o el plan, siempre y cuando tengan los conocimientos y la preparación para usar de manera eficaz esas herramientas.

5.3.1 Planes de acción

5.3.3 Directrices y otros instrumentos